Publicado
el Viernes, 10 Enero 2014 12:04
En el año 2013
hemos estado sometidos a la presión publicitaria sobre la supuesta necesidad de
la construcción de una ciudad cívica, ignorando las opiniones en contrario del
colectivo social, mientras el sistema eléctrico provincial continuaba colapsado
y sin capacidad de respuesta para dar soluciones duraderas y permanentes a la
ciudadanía.
Es así que los
técnicos estuvieron ocupados en planificar una ciudad del futuro que
graciosamente solucionaría los problemas de los chaqueños, mientras la empresa
Secheep seguía a la deriva, sin planificación para responder a los incrementos
de la demanda, sin las inversiones necesarias para que los usuarios no tengamos
que padecer los largos y ardientes veranos del Chaco.
Tal es la
irrealidad en la que viven que, en pleno caos eléctrico, los funcionarios
siguen navegando en Las nubes de Úbeda, en lugar de pensar que soluciones
tienen para la crisis energética, los vemos y escuchamos insistiendo en un
proyecto que en este momento nada aporta a la provincia y si mucha distracción
y desvío de fondos.
Por lo que es
bueno recordar, que la inversión Pública es toda erogación de recursos de
origen público destinado a crear, incrementar, mejorar o reponer las
existencias de capital físico de dominio público y/o de capital humano, con el
fin de ampliar la capacidad para la prestación de servicios y/o producción de
bienes. Si analizamos la inconsulta construcción del Centro Cívico desde el
punto de vista económico encontraremos que ella no es una inversión destinada a
ampliar las capacidades del estado, con miras a prestar eficientemente los
servicios que hacen a sus funciones esenciales o para promover el desarrollo de
las inversiones productivas. Por el contrario, para la provincia es un gasto,
un consumo presente, que en el conjunto de bienes públicos provinciales solo
pretende cambiar lo que ya tenemos por otros nuevos, que por supuesto no
beneficia al conjunto social sino a unos pocos como a la patria contratista, al
conjunto de propiedades lindantes al Parque Norte Caraguatá, cuyo valor
aumentará y a los adquirente de los inmuebles qué quedaran liberados en el
centro histórico de la ciudad.
En cambio una
inversión en el parque eléctrico provincial, sí aportará al conjunto social y
económico de la provincia, contribuyendo a la unión de sus habitantes, ya que
todos disfrutaran del beneficio.
Con el proyecto
cívico, la ciudad de Resistencia quedará dividida en dos, de un lado estará la
pueblada, en el sur, y del otro la élite funcionaria que no se mezcla ni
destiñe. La dividen amplios murallones, uno en construcción y otros en camino;
las rutas Nicolás Avellaneda y 11 y el Río Negro. Es decir que nada será
"visible" no solo por la contemplación sino porque esta élite residirá
allá lejos, oculta a las miradas impertinentes, salvaguardados por la lejanía.
En un microclima donde seguramente, nunca tendrán cortes de luz.
La realidad es
que Intentan colonizarnos mentalmente para hacernos creer que la obra de la
ciudad cívica va a contribuir positivamente al crecimiento de la provincia.
Esto no es así, porque es puramente un gasto, un consumo innecesario según
datos oficiales de $150 millones, pero todos sabemos que después por mayores
costos, actualizaciones e intereses y por ampliación colaterales la mismas
superan en diez o más veces dicho monto.
En cambio sí
destinamos esos recursos al parque eléctrico provincial, estaremos
contribuyendo al crecimiento, generando riqueza para crear un ambiente más
digno donde vivir y desarrollarnos, especialmente para los que no tenemos la
posibilidad de ir de vacaciones.
Es así que
aplicando políticas de hechos consumados, e inclusive mostrando al municipio
como obstructor del supuesto progreso, presionan mediáticamente para lograr sus
objetivos, que en definitiva son comerciales, financiero y políticos.
Creemos que los
distintos estamentos que integran la comunidad provincial deben tomar carta en
el asunto y debatir debidamente que es lo que queremos, si una ciudad cívica
sectaria o un parque eléctrico saneado, integrado y al servicio de los
usuarios.
Todo sistema
democrático involucra una permanente interacción gobernantes-gobernados y en
esta historia no se ha dado. Entonces nos urge una cuestión: ¿Estaremos en
presencia de un gran negociado y descolgado de las verdaderas necesidades del
pueblo?
Miguel
Benito Conde Olgado
La Carpa de Secheep
La Carpa de Secheep
http://www.solochaco.com/noticias/index.php?option=com_content&view=article&id=940:el-parque-electrico-provincial-y-la-ciudad-civica&catid=127:opinion&Itemid=656
Carlos Arguello, en su análisis acido, explicaba: “la precarización en esta gestión de seis años de Capitanich ha sido de una magnitud, difícil de superar en el corto y mediano plazo y el caos económico será devastador para varias generaciones…”
ResponderEliminar